Que es la misa, sus parte y porque es importante para mí.

 

La palabra misa proviene del latín  Misa, que quiere decir “envío”. Es la celebración más importante de los cristianos, donde le damos gracias a Dios, aprendemos de Él a través de su palabra y recibimos su cuerpo para tener su fortaleza. El Papa Francisco nos dice que la misa “ Da sentido a toda la semana, que somos hijos de un Padre que nos invita contantemente a poner la esperanza en Él, y que dejemos de ser esclavos de lo terrenal, que le dediquemos un tiempo a la palabra de nuestro Padre, para que fortalezca nuestro corazón”.

Cuando asistimos a misa saciamos nuestra alma que anhela el encuentro con Dios, no basta con decir que somos buenas personas y no hagamos nada por nadie, porque cuando amamos hacemos cosas que hagan feliz a esa persona y la palabra de Dios nos recuerda que es un acto que debemos hacer cualquier día y  a cualquier hermano o hermana, ese es el mensaje que la misa nos transmite los domingos  y que nos prepara para ponerlo en práctica todos los días de la semana.

Con la misa recordamos el memorial del sacrificio de nuestro Señor, también un banquete, porque así como necesitamos comer para vivir, también necesitamos alimentar nuestra alma y ser felices y cuando recibimos la ostia recibimos a Jesús en nuestro corazón,  y también recordamos el sacrificio de Jesús en la cruz, para perdonar nuestros pecados.

Durante la misa alabamos a Dios, le damos gracias por la salud, la vida y por todas las cosas buenas que nos da todos los días,  también le pedimos perdón por las veces que lo hemos ofendido, le prometemos que vamos a ser mejores personas y a cambiar y que nos ayude y proteja para poder cumplir nuestras metas, porque si no nos ponemos en sus manos no lo lograremos.

La celebración de la misa consta de dos partes, en la primera se leen las lecturas bíblicas del día y el sacerdote hace la homilía y en la segunda parte se hace la consagración del pan y del vino y se reparte la comunión entre los miembros de la iglesia.

Te dejo una guía de los ritos que se desarrollan dentro de la misa, para que aprendas la serie de símbolos rituales que se generan dentro de la misa.

Los ritos iniciales son:

* La procesión de entrada, en la que los fieles acompañan la entrada del sacerdote y se disponen a ubicar sus lugares.

*El saludo inicial, en el que el sacerdote, invocando a la Santísima Trinidad por medio de la señal de la cruz, saluda a la asamblea y les da la bienvenida.

*El acto penitencial, en el cual todos los participantes reconocen que han pecado y se disponen a recibir la orientación de Dios desde la humildad.

*El gloria, o la glorificación de Dios, oración con la que se reconoce que solo Dios es santo y que los fieles necesitan de su gracia.

*La oración colecta, en la cual el sacerdote recoge todas las intenciones de la comunidad y las presenta ante Dios.

Liturgia de la palabra

Nos indica la proclamación del a palabra de Dios y que está contenida en la Biblia, sus partes son:

Lecturas:

*Primera lectura: esta corresponde a la lectura del Antiguo Testamento, que evoca la historia de Israel y sus profetas.

*Salmo: corresponde a la lectura comunitaria, rezada o cantada, de los salmos. Los salmos son oraciones poéticas dedicadas a Dios, y muchas de ellas fueron escritas por el Rey David.

*Segunda Lectura: corresponde a la lectura de las cartas pastorales de los apóstoles, el libro de los Hechos y el Apocalipsis, presentes en el Nuevo Testamento. La segunda lectura solo se hace los días domingo y en fiestas solemnes.

*Lectura del Santo Evangelio: Es precedida por la aclamación del evangelio, que normalmente canta "Aleluya". En este momento se lee un pasaje de alguno de los evangelios canónicos, en los que se relatan las enseñanzas de Jesús.

*Homilía: es un discurso elaborado por el sacerdote, en el cual le explica a los fieles el significado de las lecturas realizadas durante la celebración.

*Credo: Tras haber escuchado la palabra y su interpretación, los fieles se levantan a proclamar el conjunto de sus creencias como comunidad.

*Oración de los fieles: En esta sección, los fieles que lo desean expresan sus necesidades a viva voz, sea en nombre propio o en representación de la comunidad.

Liturgia de la Eucaristía

Después de la liturgia de la palabra, se realiza la celebración más importante, la liturgia de la Eucaristía y se realiza el memorial de la Cena del Señor, de acuerdo a las instrucciones que Jesucristo dejó a sus apóstoles.

*Presentación de las ofrendas: la comunidad de creyentes presenta al sacerdote el pan y el vino que se trasformara el cuerpo y sangre de Cristo y  se realiza la colecta de las ofrendas.

*Consagración: El sacerdote hace recordatorio de la última cena y pronuncia las mismas palabras de Jesús, imponiendo sus manos sobre ellas y pide a Dios que, por medio del Espíritu Santo, transforme el pan y el vino el cuerpo y sangre de Jesús.

*Nos preparamos para comulgar y rezamos el Padre Nuestro, la oración que Jesús nos enseñó, para agradecer todos los días de nuestra vida.

*El sacerdote anuncia que nos demos la paz, como seña de amor que debe haber entre todos como hermanos que somos y rezamos el credo.

*EL sacerdote toma con sus manos el pan y dice “Este es el cordero de Dios que quita e pecado del mundo, ¡dichosos los llamados a la Cena del Señor”,  y todos contentan “Señor, no soy digno que entres a mi casa pero una palabra tuya bastará para sanarme”.

*Se realiza la comunión, que es el encuentro más importante de todo el día, porque recibimos a Jesús en nuestro corazón y alma y le agradecemos por recibirlo y le pedimos nos ayude a vivir como él quiere que lo hagamos.

Ritos de despedida

El sacerdote eleva una oración de gracias y bendice a la comunidad de fieles que han asistido, exhortándolos a ser testimonio de la resurrección del señor y que lo llevemos en nuestro corazón.

Todos los domingos es importante ir a misa porque es el día de la resurrección del Señor, debemos ir con actitud de oración y agradecimiento y así podremos obtener los dones de consuelo, confianza, paz, felicidad y fuerza espiritual para afrontar los desafíos de la vida.